A estas alturas es difícil que exista alguien que no se haya cruzado con alguna imagen de la herramienta beauty más famosa en Instagram. El rodillo facial, de jade o de cuarzo, ha pasado de ser un completo desconocido a convertirse en una verdadera obsesión para las amantes de la belleza. Y lo cierto es que no es para menos. Su mecanismo no puede ser más básico –una piedra oblonga de jade puro, por lo general de una pulgada a una pulgada y media de largo, que está unida a un mango con un marco de metal, como un rodillo de pintura– y sus efectos realmente efectivos. Pero el que fuera el secreto de belleza mejor guardado de las emperatrices chinas es capaz de disminuir el hinchazón de las bolsas debajo de los ojos, liberar la tensión de los músculos faciales y aumentar la luminosidad del rostro si lo incluimos en nuestra rutina diaria. Además, es capaz de conseguir que los principios activos de los productos penetren mejor y, en consecuencia, obtengamos mejores resultados.
Dadas las múltiples bondades que conlleva su uso, este gadget beauty se ha colado en las rutinas de belleza de millones de mujeres en todo el mundo, entre ellas Gwyneth Paltrow, Victoria Beckham o Miranda Kerr.
Otra de las ventajas suele ser su precio, generalmente accesible para todos los bolsillos. Eso sí, conviene elegir aquellos que son de jade de verdad, no los de cristal teñido, porque sus efectos se notan a la larga.
Si estás pensando en incorporar este utensilio a tu rutina de belleza –y te recomendamos encarecidamente que lo hagas cuanto antes–, es importante que prestes atención a unos cuantos tips básicos sobre su funcionamiento porque, aunque sencillo, es imprescindible hacerlo bien para aprovechar al máximo todos sus efectos.
Dadas las múltiples bondades que conlleva el uso del rodillo fácil, se ha colado en las rutinas de belleza de millones de mujeres en todo el mundo, entre ellas Gwyneth Paltrow, Victoria Beckham o Miranda Kerr.
¿Por la mañana o por la noche?
Lo ideal sería hacerlo por la mañana y por la noche. A primera hora, nos ayuda a desinflamar el rostro y a activar la epidermis, sin embargo, lo habitual es que vayamos con prisas y no le prestemos la atención que requiere. Así que lo mejor es hacerlo todas las noches, antes de irnos a la cama y lo apliquemos con la crema o el serum para que deslice bien.
La constancia es la clave
Como en casi todo en la vida, el rodillo facial requiere un mínimo de constancia. Dedicarle al menos cinco minutos cada noche es fundamental para empezar a notar sus efectos.
El factor masaje
Aprender a masajear el rostro con este utensilio es sencillo pero imprescindible. Existen en la red infinidad de guías para conocer los movimientos, que son siempre desde dentro hacia afuera y de abajo a arriba para potenciar el efecto drenante. Insistir en las zonas en las que queramos ver más mejoras también es otra de las claves de su uso, lo mismo que dar las pasadas suficientes para que aumente la temperatura de la piel y, por lo tanto, se active la microcirculación.
¿Cuál elegir?
A la hora de elegir el roller perfecto, los especialistas coinciden en la importancia de escoger masajeadores que se deslicen con facilidad y tengan sus partes metálicas bien engarzadas. En Rowse, la firma de cosmética natural de Nuria Val, cuentan en su catálogo con un rodillo facial de obsidiana negra y enfriamiento natural, una piedra volcánica de la que se dice que cuenta con beneficios de equilibrio. Es relajante, tonificante y aumenta la luminosidad.
El cuarzo rosa es otra de las opciones, ayuda a reducir las arrugas y finas líneas de expresión, calmar las rojeces o liberar tensión de manera natural. Lo puedes encontrar en Miin Cosmetics, por ejemplo.
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Fotos: Cortesía de Rowse.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]