[vc_row][vc_column][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»][/vc_column_text][gem_divider margin_top=»30″][/vc_column][/vc_row][vc_row css=».vc_custom_1561553716331{padding-bottom: 60px !important;}»][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]Hace tan solo cuatro días que arrancamos el 2021, un año que, a pesar de las circunstancias excepcionales, comienza –como todos–, con una lista de propósitos bienintencionados que trataremos de cumplir a lo largo de estos doce meses. Algunos se quedarán en el olvido y volverán a encabezar la lista dentro de un año, otros solo los cumpliremos a medias y, el resto, harán que nos sintamos mejor una vez superados con éxito. 

Lo normal es que tratar de gastar menos dinero en ropa esté incluido en esta lista de buenas intenciones pero, en 2021, este propósito cobra más sentido que nunca. Por eso, si ese objetivo, alineado con la conversación sobre sostenibilidad y consumo responsable, está en tu “to do list”, estas claves son para ti.

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En tiempos inciertos, compras seguras

Claro que existe cierto margen para la osadía y la experimentación estilística pero, en general, conviene apostar por inversiones seguras. Prendas y accesorios que puede que hayamos visto sobre la pasarela, sí, pero que prometen ser longevos y adaptarse a las nuevas circunstancias. En este sentido, unos vaqueros que no pasen de moda y que favorezcan a todas las siluetas son una compra esencial. El blazer que quizá ya tengas en tu armario desde hace varias temporadas, los bolsos más prácticos, los zapatos más cómodos… Existen múltiples opciones de acertar con inversiones que se queden con nosotros durante mucho tiempo.

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Lo normal es que tratar de gastar menos dinero en ropa esté incluido en esta lista de buenas intenciones pero, en 2021, este propósito cobra más sentido que nunca.

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Reflexionar antes de darle al click

El auge del comercio electrónico, las redes sociales y la inmediatez y facilidades que ofrecen los e-commerce favorecen las compras impulsivas. Lo normal es que, cuantos menos pasos requiera la adquisición de un artículo, más posibilidades hay de que lo acabemos comprando. Por eso, es importante reflexionar antes de darle al click, sopesar si realmente necesitamos esa prenda y por último, si no eres capaz de resistirte, desinstalar las aplicaciones de compras. 

Diferenciar las compras por necesidad de las que son por capricho

Para esto, poner en práctica el método Marie Kondo –es decir, la limpieza de armario de toda la vida–, es imprescindible. Este proceso cobra especial importancia durante los cambios de temporada en los que solemos ser más proclives a gastar más en las nuevas colecciones.

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Fijar un presupuesto

Saber cuánto dinero estamos dispuestos a gastar esa temporada nos ayudará a mantenernos dentro de los límites fijados y, sobre todo, a llevar un control de nuestras finanzas. Además, resulta fundamental para tomar conciencia de lo que se necesita y de lo que no. 

Tener en cuenta la durabilidad de las prendas

Esta cuestión es tan importante como el precio de las mismas. Siempre será mejor invertir en calidad que en cantidad.

Recurrir a trucos de estilismo

Un jersey negro y unos pantalones del mismo color puede cosntruir el perfecto look de oficina, pero también un atuendo formal para salir por la noche e incluso para acudir a alguna reunión de carácter festivo. Dale rienda suelta a la imaginación, infórmate, visita los perfiles de tus celebrities favoritas… seguro que se te ocurrirán unas cuantas ideas para que el mismo look parezca nuevo cada vez que te lo pones.

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Fotos: Gtres online.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][gem_image position=»centered» src=»5898″][/vc_column][/vc_row]