El sérum: por qué es el producto estrella en la rutina de belleza de una ‘working girl’

A partir de los 30, es imprescindible incluir un buen sérum en la rutina de belleza

El sérum: por qué es el producto estrella en la rutina de belleza de una ‘working girl’

[vc_row][vc_column][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»][/vc_column_text][gem_divider margin_top=»30″][/vc_column][/vc_row][vc_row css=».vc_custom_1561553716331{padding-bottom: 60px !important;}»][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]El sérum es el producto estrella de cualquier firma de cosmética y, por lo tanto, de cualquier working girl. A partir de los 30 años, es necesario aplicarlo para tratar condiciones específicas de la dermis, y permitir que actúe directamente sobre cada tipo de rostro: luminosidad, firmeza, hidratación, exceso de sebo…

Al tratarse de un cosmético concentrado, permite ofrecerle a la piel una nutrición intensa aportando un plus de cuidados extra cuando más lo necesita.[/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]Dependiendo de cada tipo de piel y de las necesidades de cada persona, es posible escoger un sérum específico que actúen de forma más profunda, como un producto con propiedades antiedad o revitalizante, que sería el idóneo a partir de la tercera década.

Sin embargo, existen productos dirigidos a pieles más jóvenes, con los que es posible combatir incluso los problemas de acné.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row full_width=»stretch_row_content» equal_height=»yes»][vc_column width=»1/2″ css=».vc_custom_1593249791005{background-image: url(https://adictic.com/wp-content/uploads/2020/06/beauty-III.jpg?id=2183) !important;background-position: center !important;background-repeat: no-repeat !important;background-size: cover !important;}»][gem_divider margin_top=»400″][/vc_column][vc_column width=»1/2″ disable_custom_paddings_mobile=»true» css=».vc_custom_1561556193635{padding-top: 50px !important;padding-right: 80px !important;padding-bottom: 50px !important;padding-left: 80px !important;background-color: #000000 !important;}»][vc_row_inner][vc_column_inner offset=»vc_hidden-xs»][gem_divider margin_top=»130″][/vc_column_inner][/vc_row_inner][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]

Los 30 años es la edad idónea para comenzar a incorporar un sérum a la rutina de belleza, ya que es a partir de entonces cuando comienzan a hacerse presentes los primeros signos del envejecimiento

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Cómo aplicarlo

Lo primero que hay que saber para la correcta utilización de un sérum es que es aconsejable aplicarlo dos veces al día, por la mañana y por la noche. A primera hora nos permitirá mantener la hidratación de la piel; y antes de dormir, potenciará sus efectos.

Hay que hacerlo con el rostro limpio, libre de maquillaje o polución, evitando así que los poros estén obstruidos.[/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]Después del sérum, se debe aplicar un tónico, con la ayuda de un algodón, mediante suaves toques sobre la piel o movimientos circulares suaves. Este gesto nos ayudará a preparar la piel para que acepte el tratamiento posterior: una crema hidratante de día de noche (según el momento), con las características específicas de cada tipo de rostro: antienvejecimiento, antiedad, antimanchas, revitalizante…

Es importante mantener esta rutina con nuestro sérum cada día, ya que será la única manera de poder comprobar los resultados y quedar satisfechos con la acción del producto sobre nuestra piel.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][gem_image position=»centered» src=»2185″][/vc_column][/vc_row][vc_row css_animation=»bottom-to-top» css=».vc_custom_1561555563953{padding-top: 55px !important;padding-bottom: 10px !important;}»][vc_column offset=»vc_col-md-6″][gem_quote style=»1″ no_paddings=»1″ custom_style=»1″ background_color=»#000000″ text_color=»#ffffff» quote_color=»#656565″]

El producto de cuidado imprescindible para rostros es el sérum, que devuelve a la piel su resistencia, elasticidad y luminosidad, pero sobre todo la hidratación

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Trucos

Hay que tener en cuenta que una dosis de sérum es más que suficiente para que cumpla con su función. Un exceso de producto en la puesta podría perjudicar engrasando en exceso la piel.

Es recomendable aplicar el producto por zonas. Gracias a ello podremos extenderlo de manera más uniforme.

Hay que acordarse del cuello y el escote, donde nuestra piel es igual de sensible que la del rostro.

Por último, es necesario manejarse con suavidad a la hora de masajearse la cara. De esta manera, conseguiremos que el producto de absorba de manera correcta. En caso de que sea necesario frotar demasiado para tener la sensación de que el producto ha desaparecido, será señal de que hemos utilizado demasiada cantidad.[/vc_column_text][gem_divider margin_top=»50″][/vc_column][/vc_row][vc_row full_width=»stretch_row_content» equal_height=»yes»][vc_column width=»1/2″ disable_custom_paddings_mobile=»true» css=».vc_custom_1561556075303{padding-top: 50px !important;padding-right: 80px !important;padding-bottom: 50px !important;padding-left: 80px !important;background-color: #000000 !important;}»][vc_row_inner][vc_column_inner offset=»vc_hidden-xs»][gem_divider margin_top=»130″][/vc_column_inner][/vc_row_inner][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]

Antes de aplicar el producto es necesario limpiar bien el rostro para dejar los poros libres de polución o maquillaje. De esta manera el sérum penetrará adecuadamente en la piel

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En verano, un extra de vitamina C

Durante los meses de más sol y calor, es recomendable apostar por un sérum rico en vitamina C. Su efecto antioxidante consigue que la piel apagada recupere su luz de manera inmediata, además de protegerla de los radicales libres, aumentar sus defensas y convertirse en una barrera protectora extra.[/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]La vitamina C también actúa sobre las manchas, dejando un tono cutáneo más uniforme y suavizado. Por su fuera poco, es capaz de estimular la producción de colágeno y elastina, dos claves que aportarán firmeza y elasticidad.

Lo mejor de todo es que le proporciona a la tez un extra de luminosidad al instante, perfecta para recuperar un rostro perfecto durante las 24 horas del día.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]

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