[vc_row][vc_column][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»][/vc_column_text][gem_divider margin_top=»30″][/vc_column][/vc_row][vc_row css=».vc_custom_1561553716331{padding-bottom: 60px !important;}»][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]Reciclar, reusar, revender… las nuevas generaciones están cambiando la forma de consumir. En este nuevo modelo de negocio, las marcas sienten la necesidad de cambiar las reglas del juego, pero también el cliente. Si no sabes ni por dónde empezar y toda la ropa de tu armario te parece aburrida y pasada de moda, presta atención a estas 6 claves para que la ropa de temporadas anteriores parezca nueva. [/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]

Practica el do it yourself

¿Cuántas veces has pensado en “hacerle algo” a ese vestido de hace un par de años para poder seguir aprovechándolo? Lo cierto es que está nuevo y te sigue gustando, pero hay algo en su silueta que no te convence del todo. Acortarlo, añadir un cinturón, estrechar la cintura quizá…Un poco de ahorro y un poco de diseño propio. En las revistas de moda hay múltiples ideas en las que inspirarte para que vuelvas a estrenar ese vestido que entonces fue tu favorito.

[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row full_width=»stretch_row_content» equal_height=»yes»][vc_column width=»1/2″ css=».vc_custom_1601305475845{background-image: url(https://adictic.com/wp-content/uploads/2020/09/INT1-20.jpg?id=3705) !important;background-position: center !important;background-repeat: no-repeat !important;background-size: cover !important;}»][gem_divider margin_top=»400″][/vc_column][vc_column width=»1/2″ disable_custom_paddings_mobile=»true» css=».vc_custom_1561556193635{padding-top: 50px !important;padding-right: 80px !important;padding-bottom: 50px !important;padding-left: 80px !important;background-color: #000000 !important;}»][vc_row_inner][vc_column_inner offset=»vc_hidden-xs»][gem_divider margin_top=»130″][/vc_column_inner][/vc_row_inner][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]

Estas son las 6 claves imprescindibles para reducir el consumo y practicar un modelo mucho más sostenible.

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Rescata los básicos atemporales 

Esos en los que siempre merece la pena invertir. Bien sea una camisa blanca de algodón de buena calidad, un jersey de cashmere azul marino o un abrigo negro con cinturón, ese que parece que ya no te dice nada pero, en realidad, nunca pasa de moda. Si has sido lo suficientemente hábil como para ir construyendo tu propio fondo de armario siempre tendrás algo que ponerte y que parezca nuevo.

Combina, combina, combina

Aquí la imaginación y tu habilidad como estilista de moda desempeña un papel fundamental. Si pones un poco de empeño podrás crearte un outfit para cada día de la semana combinando dos o tres prendas fijas con otras variables. Recuerda, los accesorios (o la ausencia de ellos), son capaces de elevar un look hasta el infinito. [/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=»1/2″][vc_column_text css_animation=»bottom-to-top»]

Investiga en las plataformas de reventa

Puede que hace unos años resultase impensable comprar ropa por internet a desconocidos, pero en 2020 esta práctica es más habitual de lo que puedas pensar. Plataformas como Vinted han sido capaces de crear un modelo de negocio de ropa usada (o no) a precios más que accesibles dispuesta a vivir una segunda vida plena. Aquí también podrás deshacerte de aquellas piezas que crees que ya no vas a recuperar jamás y que pueden ser interesantes para otros clientes.

Apúntate a tutoriales de costura 

Te sorprendería ver la cantidad de opciones que existen para transformar el aspecto de una prenda. No necesitas ser una experta costurera para seguirlos y, además, muchos de ellos son gratuitos. No los desmerezcas.

Y por último…

Piensa en todos los beneficios que reciclar, revender y reusar suponen para tu economía y para el planeta. Inmersos en el último trimestre de 2020, es el momento de apostar por un nuevo modelo y evitar, en la medida de lo posible, contribuir a los efectos contaminantes de la industria. Ya se sabe, renovarse o morir.

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